“¡SE LO IBA A CONTAR A MUCHA GENTE, LO IBA A GRITAR MUY FUERTE HASTA QUE ALGUIEN AL FIN LO ESCUCHARA Y LE CREYERA!”
Esta es la historia de Enrique y la historia de muchos niños y niñas que viven en mundos donde hay adultos que abusan de su inocencia, de su afecto, de su cuerpo. Pero también es la historia de un niño que a pesar del dolor y de la confusión, encuentra en sí mismo y en otras personas la manera de salir de allí.